miércoles, 21 de noviembre de 2007

UNA CUESTIÓN DE NARICES...TECNOLÓGICAS

A lo mejor el concepto de hogar digital no acaba de estar muy claro, pero esto ya me supera. Llega la nariz electrónica, un ayudante en la cocina del hogar digital capaz de detectar si la carne está fresca. Se acabaron las dudas. Saber si la carne tiene buen color, si huele bien. La nueva nariz electrónica nos dice al momento si la carne está fresca y se puede cocinar. O si, por el contrario, la comida se ha estropeado y no conviene comerla. Ver para creer.

Prototipo anterior al SensorFreshQ

A todos nos gusta comer la carne en su punto. Poco hecha en mí caso. Eso es cuestión de gustos. Pero siempre fresca y con toda la calidad. Sin embargo, la carne viaja del punto de origen a la tienda o supermercado, de allí a nuestra cocina y a menudo en el congelador para utilizarlos más adelante. Y al descongelarlos miramos detenidamente la fecha de caducidad, observamos su color y, en algún caso, los olemos. Esto ya es pasado. La nueva nariz electrónica de PlanetaPluton.com detecta al momento si la carne está fresca o no y en menos de un minuto, SensorFreshQ ofrece la solución.


El dispositivo trabaja en dos modos distintos, según el tipo de carne, de aves, cerdo o ternera. Luego sólo hay que acercar la nariz electrónica a un centímetro de distancia de la bandeja con los alimentos. Ni siquiera hay que tocar la carne. Basta con aproximar el detector. Al alejarse de la carne, el detector se ilumina en función del resultado. Color verde, carne fresca. Color amarillo, carne todavía comestible. Y con el color rojo, ya se pueden imaginar. Sólo se puede encontrar en la tienda de regalos PlanetaPluton.com y su precio, 100 euros.

Fuente: CASADOMO.com - 21/11/2007